Deja que se rompa...

 El la segunda vez en mi vida que me encuentro con este mensaje.

Hoy me lo ha enviado mi hermana con un bonito video que tenía de fondo una de mis películas favoritas.

Creo que más que dejar que se rompa, es aceptar que está roto.

O bien, pensándolo más detenidamente, creo que debo dejar que se rompa esa idealización para dejar pasar la realidad.

Hace poco tiempo mi terapeuta me dijo "te has esforzado tanto, que parece que estar forzando algo que no se está dando". La realidad: no.

Siempre he sido muy brillante. En realidad, en los últimos meses me he esforzado mucho por no caerme más bien. Es cierto, hablo mucho, tal vez me quejo mucho, pero es que no me había pasado sentir esto del struggle para encontrar trabajo o que por mi dedicación y esforzada trayectoria precisamente ahora no lo consiga. Esta narrativa me la he contado desde que salí del doctorado en noviembre.

La verdad no me he esforzado; lo he hecho más bien para hacer publicaciones perfectas que al final TA-RÁN no hago porque no llegan a serlo.

Entiendo que la gente me tenga mucha fe. Pero la que tiene que tenérsela SOY YO.

Eso es lo que he visualizado desde estas semanas que regresé a terapia justamente anticipando no saltar al precipicio después de que me dijeran que "se decidieron al final por otro candidato que se ajustaba poquito más a las necesidades del centro"...

Temo esforzarme de más. Temo sentir, como ahora, que lo que he hecho ha sido muy desperdiciado. Más algo que me dejó claro mi proceso desde hace tres sesiones es que, además de esa narrativa desde la sombra, muy oscura, que me cuento respecto mi obsesión y perfeccionismo, es que, en realidad, hubo un trauma muy profundo gestado desde mis relaciones personales en los últimos años. Y eso abrió la puerta al desgaste del autoconcepto y autoestima tanto personal como laboral.

Definitivamente reconozco que ahora más que nunca no creo en el karma. La gente hace daño sin más y no pasa nada (para ellos). No estoy tampoco de acuerdo con estas nuevas pseudo corrientes "positivas" que lo único que hacen es cargarte de culpa. Tipo: "era la lección que necesitabas", "son personas y experiencias necesarias para tu propia evolución", "es lo que reflejas" blablabla, ¿te das cuenta lo mierdero que es eso?

O sea que, el que hace daño ¿CUÁLES LECCIONES "NECESITA" APRENDER? ah no, perdona, ya las ha aprendido, ahora se le llama "maestro". Entonces tiene ESE lugar privilegiado y e v o l u c i o n a d o. Hace daño, no le pasa nada, sigue su vida mientras tu lección era una turra traumante, porque era lo que "necesitabas" aprender, o "no te querías o sabías lo suficiente"... ¿si se dan cuenta de que van esas mierdas de "filosofías" modernillas actuales?

No, yo no tuve la culpa de que alguien dañado me dañara. Estoy harta de decir y repetir el "lo permitiste". 

Mi única responsabilidad y lo que he visto es justo que, de haberla, la única responsabilidad que ahora sé, tomo y soy consciente es que ES NECESARIO PONER LÍMITES y cuidarse. No desde un muro de hierro, sino desde el verdadero amor que me tengo o que en ciertos momentos debo buscar para refugiarme. Ese amor que debo sanar y reconstruir, sólo eso.

Por lo demás, ahora sí debe venir el esfuerzo y volver a lanzar piedras y cartas. Siempre he logrado lo que me he propuesto, ahora sólo quiero saber qué sí necesito, que sí tengo, y por qué voy a avanzar... ESA SÍ es una tarea para mi.

Tampoco es necesario perdonar, que se vaya esa gente AL AVERNO.

Punto, tan tán.

Es tiempo de buscar y encontrar.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Ser adulto es aprender a llorar con horario.

Terminando, pasando y soltando.