¿Quién se ha llevado el mes de abril?
Mi mes favorito, en donde casi todos los días me sentí contenta, confiada y segura. Y en los que la mayoría de los días paradójicamente el espejo no ayudaba. A un mes de abrir mis redes sociales, considero no he sanado del todo. El punto a favor de la revelación de ayer es que, con todo y todo, sigo viva. Y que en vez de tirarme al drama o maldecirme o maltratarme... hoy sólo lo dejé pasar. Me levanté y arreglé. Hoy tengo mi evaluación intermedia de mi cuarto semestre en el doctorado -ding ding diiiiing, SI LOGRO COSAS ajajaja- He decidido no estrenarme (aunque lo estoy, si no, pregúntenme por el dolor de cabeza). No lo sé. Las redes muestran tanto y a la vez tan poco... O no sé si ya estoy sana de algunos aspectos y simplemente ese mundo no es para mi. Reconozco que me he alejado. Y que a diferencia de la gente, yo no vivo una vida maravillosa, pero, lo maravilloso es que es MI vida, ¿sabes? Sí, extraño a ciertas personas. Les volvería a hablar... pero mi corazón y mi mente susurraro