Autocuidado

 Llevo poco más de dos meses desde que regresé a terapia.

Y ha sido una maravillosa experiencia. No sólo por ser terapeuta nueva, y no sólo que es un enfoque desconocido para mÍ como paciente.

Me ha gustado y creo que llegó en el momento justo, de la manera perfecta y por la mano de quien debía ser.

He comenzado el trabajo "del sótano". Ese que en algún momento nombré con mi psicóloga anterior.

Ahora me siento lista, y he comenzado sin si quiera reparar en las "consecuencias".

Caí en cuenta de los símbolos que han pasado factura en mi cuerpo.

Y ahora, en conocimiento de eso, estoy lista para comenzar de nuevo a cuidarme.

Desde la conciencia, desde la competencia (sí, porqué no) y desde mi propia perspectiva y apariencia.

Ha sido un año y medio muy difícil.

Diría que han sido dos, pero en realidad desde hace año y medio comencé mi trabajo de fondo y a encontrar esas cosas que se reflejaban en el espejo y no quería ver.

Me envolví en dolor, frustración, recelo, angustia, desesperación, desesperanza...

en muchas cosas.

Hoy digo B A S T A.

Lo que viene es bueno. Y lo que es y está también,

Yo dependo de mi.

Y no, no es obvio.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Ser adulto es aprender a llorar con horario.

Terminando, pasando y soltando.