La -NO- Típica
empezaría por escribir que en este año no quiero sentirme como león en jaula.
que es el tiempo de forjar mejores lanzas y que, en definitiva, me encuentro mejor preparada.
no sé en dónde diablos quedó aquella magia por la cual mi cuerpo de alguna manera se agitaba esplendorosamente.
he dejado de sorprenderme.
sin embargo tampoco no soy la pinche bruja amargada del cuento, que vive en una cabaña alejada de toda perturbación y demostración de cariño. más bien, diré que este tipo de metamorfosis consiste en ser ADULTO.
c
ya soy uno en toda la extensión y eso se siente... más allá de raro podría describirlo como, cha... no sé ni como.
el mundo toma formas tan distintas, insospechadas, las cuales en un momento no me parecieron naturales, más ahora, pienso que es antinatural no verlo así.
las cosas que jamás dejan de sorprenderme son:
*una buena plática
*un paisaje
*una sonrisa
*la risa como remedio infalible :D
*un buen libro
*alguien talentoso
*la música en mis oidos
*el poder de un abrazo y
*lo rasposo que puede llegar a ser una lágrima en el rostro.
espero no dejar que mi corazón y mi propia personalidad dejen de ser juguetones.
ahora, he dejado atrás a la chica simplona. a la escaza de expectativas más con ambiciones muchas. carpichosa...
hoy por hoy soy una mujer la cual es más cabeza que corazón, pero que en este año, lo incorporado a mi lista será despertar una vez más esa catapulta que nos guía a lugares o con personas increíbles.
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